Este es un maravilloso tema para reactivar el blog este 2021, con la esperanza puesta en que todo lo vivido durante el 2020 nos permitió crecer en todos los ámbitos de nuestra vida personal y profesional.
Son muchas las acciones que realizamos diariamente las que comprometen la salud propia y la de mi entorno, por lo que una adecuada educación ambiental es la respuesta idónea para poder lograr cambios significativos en los hábitos, conductas y acciones diarias que se realizan para lograr una real sostenibilidad del planeta.
Hoy más que nunca, urge la generación de alternativas para revertir el impacto de nuestras acciones a los límites planetarios, causados por el uso excesivo de los recursos, de pesticidas, de combustibles fósiles y la tala de bosques entre otros.
Este año en la celebración del día mundial de la educación ambiental se busca lograr los siguientes propósitos:
Hacer que las personas tomen conciencia y se sensibilicen con respecto a los problemas medioambientales de su entorno, para que puedan buscar, proteger y brindar soluciones a los mismos.
Educar a la sociedad para que entiendan que es el medio ambiente, su importancia y el delicado equilibrio que existe entre hombre y naturaleza.
Sembrar valores medioambientales.
Ayudar a los grupos sociales a desarrollar las habilidades necesarias para buscar soluciones a los problemas ecológicos de su entorno inmediato.
Llevar las estadísticas de la realidad en materia medioambiental y enseñarle a las personas a evaluar la evolución del proceso, bien sea para evidenciar la mejoría o detectar una problemática que se les está yendo de las manos.
Incentivar la participación de la sociedad en la búsqueda de soluciones a los problemas del medio ambiente y a que ellos tienen el deber de exigirle a los gobiernos que tomen medidas.
Para Eduard Müller las actitudes que obstruyen los caminos de solución, van de la negación del problema a la indiferencia, la resignación cómoda o la confianza ciega en las soluciones técnicas. Necesitamos una solidaridad universal nueva.
Como lo plantea la Encíclica Laudato Si 191 "Se trata de abrir camino a oportunidades diferentes, que no implican detener la creatividad humana y su sueño de progreso, sino orientar esa energía con cauces nuevos."
Una propuesta que existe en el país como alternativa de solución integral es a partir del desarrollo generativo, el cual es un modelo de desarrollo, de crecimiento inclusivo y que respeta la biodiversidad, permite una economía en la que la riqueza generada sea distribuida justamente entre los agentes de la misma, las personas, es un desarrollo basado en un crecimiento inclusivo desde iniciativas locales, que apoyan la regeneración de la biodiversidad.
Su visión del mundo se representa en el siguiente esquema.
Desde esta perspectiva se busca generar una transformación de la educación ambiental que articule el saber con el hacer, en donde se favorezca la cooperación y co-creación, por lo que debemos avanzar en el rumbo correcto, hacia la vivencia diaria de las posibilidades que nos brinda nuestro entorno en armonía entre todos sus elementos como un todo vivo.
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